5 pequeños cambios para conseguir grandes progresos
¡¡Hoy estamos de estreno!! Este es mi primer post en el equipo de SG Nutricionistas, hecho con amor y cariño y con muchas expectativas positivas para que os guste. Disfrutad de la lectura 🙂
Para los que aún no me conocéis, me presento. Soy Claudia Miñana, Dietista-Nutricionista y tengo 23 años. A día de hoy, algo que tengo muy claro es que me queda mucho por aprender. No solo a nivel profesional (la nutrición es taaaan amplia y se actualiza día a día), sino también personal.
En este tiempo dedicado a consulta podría decir que he aprendido tanto de mis pacientes como ellos de mi (ellos sobre nutrición, yo sobre la vida). Hay tantos puntos de vista como personas en el planeta y eso me ha llevado a buscar miles de formas de comunicar, transmitir, enseñar… ya que no hay una única fórmula maestra.
Y así es todo en la nutrición, no hay una única forma de hacerlo bien, no existe el blanco o negro: esto es bueno, esto es malo. NO. Hay muchos caminos que nos pueden llevar a seguir una vida saludable, física y mentalmente. Es importante tratarlo como un CONJUNTO. Un conjunto de acciones que nos lleven a un estilo de vida saludable: alimentación adecuada, vida físicamente activa, descanso suficiente de calidad, tranquilidad mental, alejar malos hábitos como tabaco y alcohol…
Sí, sé que es lo típico que se acostumbra a decir, que lo habéis oído miles de veces, que a veces no es fácil porque “me falta tiempo para estudiar”, “trabajo muchas horas”, “quiero pasar tiempo con mis hijos”, “no quiero privarme de salir con mis amigos”… Pero NO hay que renunciar a nada, porque cuando adquieres un hábito que te gusta, no es una obligación, es una elección.
Encontrar el placer en las pequeñas cosas, disfrutar de nuestra gente y cuidarnos a la vez es una bonita sensación.
Tampoco la nutrición consiste en hacer personas perfectas, porque la vida nos trae situaciones en las que debemos adaptarnos de la mejor forma que sepamos. Pero cuando hay buenos hábitos en la base, por pequeños que sean, y estamos a gusto con ellos, no suponen un esfuerzo.
¿Por dónde empezar? Podríamos comenzar por alejarnos de todos aquellos hábitos nos alejen de una vida saludable:
- Evitar el tabaco
- Tomar mejores decisiones, por ejemplo no escoger siempre bebidas con alcohol o refrescos azucarados o edulcorados siempre que nos juntemos con amigos (o quizá sí disfrutar de una copa y a continuación seguir con agua)
- Potenciar la vida activa actividad, haciendo más pasos al día, evitando el ascensor…
- Fomentar un descanso de calidad, por ejemplo respetando las horas de sueño, no acostarse rodeado de pantallitas (móvil, tablet, televisión…)
¿Qué 5 pequeñas acciones podrían ayudarnos a fomentar buenos hábitos?
- Haz que tu postre sea saludable, por ejemplo escoge siempre fruta fresca y de temporada.
- Incorpora una buena ración de verde en tus platos, tanto en comidas como en cenas.
- ¿Para beber? Prioriza el AGUA. Aunque puedes variar con agua con gas, café, tés o infusiones…
- Realiza ejercicio de forma regular (que te guste y motive) 2-3-4 veces a la semana en función de tus posibilidades y de lo que te motive más.
- Descansa bien y suficiente, intenta dormir entre 7-9 horas
Y lo más importante, es que puedas incluir estos hábitos en tu rutina y se adapten a tu ritmo de vida para que sean cambios a largo plazo. Y si tenemos 10 puntos a mejorar y ahora mismo podemos cambiar 5 de ellos, ¡bienvenidos sean! Cuando estés preparado, buscaremos la mejor forma de cambiar los otros 5.
¿Y qué pasa si estas navidades no he podido seguir buenos hábitos?
Pues NADA, no pasa nada, no te denuncian ni te castigan ni yo como nutricionista te voy a regañar ni culpar. Olvídate de eso. El proceso de cambiar de hábitos es un camino a recorrer, por lo que si empezaste hace poco es probable que necesites más tiempo para interiorizarlos. Y si empezaste hace más tiempo, como yo o como cualquier nutri, no somos perfectos (ni pretendemos serlo) y también hemos disfrutado de un trocito de turrón y uno de roscón de reyes.
Nadie es un robot y darnos pequeños caprichos puntuales no es malo, lo malo es mantener estos malos hábitos después de navidad y que se conviertan en el día a día de nuestros próximos 30 años. Simplemente nos hemos salido de la normalidad, hemos de ser conscientes, y volveremos a los buenos hábitos pasadas estas semanas.
No te castigues, no te martirices, no sometas a tu cuerpo a batidos detox, dietas restrictivas, dietas milagro o entrenamientos de alta intensidad para compensar estos días de excesos. Todo esto solo nos llevará a un elevado estrés mental y efectos rebote en el peso que no nos favorecen. Si sientes que lo necesitas o no sabes como hacerlo, pide ayuda a profesionales que te puedan ayudar en función de tus circunstancias.
Aquí estamos el equipo 💥SG nutricionistas💥 para resolver tus dudas y guiarte por el mejor camino 🙂